top of page

Génesis.

“He nacido Si vieras qué agonía”

Vicente Aleixandre. Espadas como labios


Invocación

Letras negras, peregrinas notas errantes Desquiciadas bailarinas sabias amantes misteriosas adivinas


Tengo en la boca un sabor a ceniza Es un registro del pasado escrito En el papiro de éstas mis encías Tal vez los restos de voces de antaño


En mi saliva hay rumores disueltos Revolotean, son pájaros líquidos Quiebran mis muelas, y discurren y entran Y salen de mis interproximales


Trago y recuerdo: El incienso o memoria Ese lustre de familiaridad Alfombra usada, ratón diligente Por fuera hechiza, mas roe por dentro


Su aroma abre camino y autoriza Que el tiempo brote desde el interior Y no hubo piedra que quisiera ser Refugio o espejo de nuestro calvario


Las frías letras aman las parodias Como los mirlos callan su negrura: Vaciando de aire sus huecas entrañas Y mudando su inmediatez en arte


En canción de amor Rocas de silencio Gorjeo de notas


No abren sus bocas las peñas serenas Seres eternos de formidable hambre Impertérritas se alejan, no miran Nada desean o no, ni desdeñan


Son son son son son son son son sólidas Como yo no las miré, no me miran No devuelven ni el desprecio siquiera Tanta es su sabiduría telúrica


Añoro no añorar nada de nada Echo de menos la falta de anhelo Por el orden y la taxonomía Y la brisa bisbisea canciones


Sabidas y conocidas, sabidas Y repetidas, sabidas, sabidas Conocidas, repetidas, sabidas Que prefiero no oír ni interpretar


Sin duda, más que nunca, soy eterno A pesar de que lo prohíbe el tono De las visibles arrugas de mi alma O soledad trazada al infinito


Hoy sin duda más Que nunca jamás, Es hora del Génesis


De nuevo


Más poesía en:


 

bottom of page